Forrar unas pulseras con hilo es una forma fácil y rápida de darle a tu bisutería un aire completamente nuevo. Seguro que tienes por casa algún brazalete redondo que ya apenas usas…¡utilízalo como materia prima para hacerte con un nuevo accesorio!
Esta idea de forrar pulseras se puede aplicar a todo tipo de pulseras viejas, desgastadas o simplemente, que ya tengamos aburridas, y queda especialmente vistoso en unas un poco anchitas. La elección de los colores de los hilos queda a tu criterio, y puedes hacer, por ejemplo, pulseras color block, utilizando hilos de colores totalmente dispares.
Lo que está claro es que el mecanismo de forrar las pulseras es súper sencillo. ¿Lo vemos?
Todo lo que necesitas para hacer este proyecto DIY son hilos de bordar de colores y un buen pegamento, tipo alkill.
Selecciona los hilos que vas a utilizar (puedes mezclar tantos colores como quieras) y pega un extremo de los mismos en la pulsera, con un poquito de pegamento. Coge uno de los hilos y comienza a envolver la pulsera, ocultando la mancha del pegamento y asegurándote de que al forrar, dejas los otros hilos por debajo.
Cuando quieras cambiar de color, simplemente has de coger el hilo deseado y seguir envolviendo, dejando los otros dos colores por debajo.
Al aproximarte al final, debes cortar los colores que ya no estés usando, y continuar solo con uno, que al envolver el brazalete cubrirá ya los extremos de los otros hilos. Después, el final del hilo puedes asegurarlo con un puntito de pegamento, y cortar lo que sobre.
Como ves, forrar pulseras es muy fácil y apenas te llevará 10 minutos. Además, puedes crear tantos diseños como quieras para que tus pulseras combinen con diferentes looks. Pero lo mejor de todo es que es una forma de reutilizar cosas que ya tienes por casa y a las que no les estás dando mucho uso.
¡Y si te cansas de tu pulsera forrada de hilos, es igual de fácil deshacer todo el proceso y volver a disfrutar de tu pulsera original!
Vía: Lovely Indeed
