Forrar pulseras con tela es una muy buena idea para reciclar unas viejas pulseras que ya tengas aburridas, o que ya no uses. Se trata de un proyecto DIY muy sencillito, y de hecho no es la primera vez que vemos cómo forrar pulseras (pero con hilo).

Eso sí, con la tela podemos forrar pulseras o forrar algo que nos valga de pulseras. Te propongo comprar anillas para la cortina de ducha y después envolverlas con retales estampados. ¡Nunca unas pulseras te habían salido tan baratas!

Y es que un pack de anillas de ducha no cuesta más de un par de euros…¡y vienen un montón! Tendrás un montón de pulseras para forrar con telas diferentes. En cuanto al envoltorio, si te gusta el DIY es probable que ya haya un montón de retales por casa sobrantes de otras manualidades. ¡Aquí se aprovecha todo!

Lo primero es adaptar las anillas al tamaño de tu muñeca, por lo que es mejor no comprarlas muy pequeñas. Después, retiras la parte móvil, y ya te quedan unos estupendos brazaletes abiertos. ¡Ya solo queda forrar!

Básicamente, forrar es tan fácil como pegar un trocito de la tela con pegamento, e ir envolviendo todo a lo largo de la pulsera. Al llegar a los extremos (si hay), cortas, fijas bien con pegamento, ¡Y listo! Da lo mismo que estés forrando una anilla o una pulsera anterior más sosa.  De hecho, puedes probar con ambas cosas para conseguir pulseras de diferentes tamaños.

Estas pulseras forradas son fáciles, baratas y muy alegres. ¡Lo tienen todo! se trata de un complemento ideal para darle un toque de color al otoño, y, al ser tan sencillas, puedes hacer un montón con telas de estampados diferentes, y después combinarlas sobre el brazo.

Otra opción es mezclar retales de varias telas diferentes en una misma pulsera, para crear un look aún más original y personal. ¡El nivel de personalización de estos brazaletes está en tu mano!

Foto vía: Hello its me…Kiki Dee